En la Sala de Sesiones del Consejo Municipal de Rosario, se aprobó la ordenanza N° 10.536, la cual fomenta la radicación de empresas de triple impacto en la ciudad de Rosario. Este proyecto fomenta la rentabilidad de las compañías teniendo en cuenta el impacto social y ambiental en sus actividades.
Las empresas de triple impacto son “un tipo novedoso de compañías que buscan utilizar las fuerzas del mercado para dar respuesta a problemas sociales y/o ambientales de las comunidades en las que están insertas”, promoviendo así una línea de impacto económico, social y ambiental. Este tipo de empresas deben operar “bajo altos estándares sociales, ambientales y de transparencia” y en la toma de decisiones deben ser considerados no solo los intereses financieros de sus accionistas, sino también los intereses a largo plazo de la comunidad a la que pertenecen y el ambiente que los rodea. En síntesis, las empresas de triple impacto se distinguen y diferencian de empresas tradicionales por perseguir una doble misión: por un lado, generar utilidades razonables para sus inversionistas, y por el otro, generar beneficios sociales y ambientales.
En la búsqueda de iniciativas que orienten sus esfuerzos en alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la ordenanza N° 10.536 pretende ampliar el deber de los accionistas y gestores para incluir intereses no solamente financieros, sino que se comprometan a generar un impacto positivo en la sociedad; y que estas empresas compitan no solo por ser las mejores en el mercado, sino también por mejorar las condiciones humanas y ambientales.
La ordenanza también plantea la creación de un registro de empresas, que al inscribirse permitirá a la misma obtener un sello local de triple impacto, a través del cual pueden acceder a los beneficios que asemejan a una certificadora oficial. Se pretende dar reconocimiento al compromiso por adherirse a la iniciativa, y dotar a la ciudad de Rosario de cualidades para incentivar el cambio social y ambiental.
En la ciudad ya son varias las empresas que están certificadas y trabajan para cumplir los compromisos de triple impacto: económico, social y ambiental. En el año 2022 ya eran 129 empresas certificadas, y ahora se suman más.
Es importante resaltar que la ordenanza es resultado de un proceso de trabajo entre la Municipalidad de Rosario con Empresas B o de Triple Impacto, impulsando a la ciudad como una referencia internacional de las nuevas economías.