El miércoles 17 de julio, la Cámara de Senadores de la Nación declaró la emergencia climática y ecológica global, y exhortó al Poder Ejecutivo Nacional a profundizar la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, de acuerdo a los lineamientos trazados por el Panel Intergubernamental de Cambio Climático ONU en el Informe Especial sobre Calentamiento Global de 1.5°C, publicado en octubre de 2018, y en concordancia con el compromiso asumido en el marco del Acuerdo de París, aprobado y ratificado por Ley 27.770.
De esta forma, el Senado reconoció el impacto devastador que los eventos climáticos extremos tendrán en la producción de alimentos en Argentina, las inundaciones, la disponibilidad de agua, la salud pública, y los daños causados por incendios forestales. Adhieren así, a los pedidos de los movimientos juveniles y organizaciones de la sociedad civil en Argentina para:
*Cumplir con los estipulado en el Acuerdo de París y considerar las conclusiones del último informe del IPCC. *Controlar y hacer cumplir las leyes de presupuestos mínimos ambientales. *Promover una alimentación sostenible para minimizar la degradación ambiental que generan la ganadería y la agricultura animal. *Acelerar la transición justa hacia una matriz energética de fuentes renovables. *Implementar medidas concretas de Adaptación al Cambio Climático.
Además, el Senado aprobó y giró a la Cámara de Diputados este miércoles un proyecto de ley que establece presupuestos mínimos ambientales para la adaptación y mitigación del cambio climático global. Este proyecto crea un “gabinete nacional de cambio climático”, que será presidido y coordinado por el Jefe de Gabinete de Ministros, y cuya función será articular entre las distintas áreas de gobierno de la administración pública nacional, la implementación de un “plan nacional de adaptación y mitigación al cambio climático”.